Es un hecho que en verano hacemos más el amor, pero ¿te has preguntado alguna vez por qué? Tener más tiempo libre influye, pero también habrás oído que hay más rupturas en el período vacacional. Entonces, ¿debes esperar o temer que llegue esta época del año? Si quieres que tus días de descanso te generen recuerdos inolvidables, toma nota de todo lo que te contamos.

¡Por fin llegan las vacaciones! Y eso significa menos obligaciones y más tiempo para dedicarte a tus aficiones, amigos, familia y también a tu pareja. Compartir ocio es mucho mejor que repartirse el trabajo y hablar sólo de problemas. Todo esto creará una buena disposición y un ambiente ideal para los encuentros amorosos.

¿Cómo nos afecta el verano?

Existen otra serie de condicionantes externos que pueden favorecer los arrebatos carnales. Aunque parezca un tópico, la ropa veraniega por sus colores, ligereza y en ocasiones su escasez despiertan tu deseo sin previo aviso.

Otro dato curioso: la luz solar puede favorecer nuestra excitación pues afecta a la glándula pineal en el cerebro, que para algunas personas juega un importante papel en la actividad sexual. Por ello cuando pasamos más tiempo al sol podemos llegar a notar que nuestro deseo aumenta.

Salir de viaje.

Si hay algo que nos puede ayudar a desconectar de verdad es irnos de casa. Cambiar de entorno es una de las claves para romper la rutina.. Te alejas de la monotonía y las obligaciones del día a día, te relajas, compartes más tiempo con tu pareja y también más actividades agradables para todos…Estos factores favorecen encuentros con una pasión renovada. No es necesario elegir un gran hotel de lujo en una exótica ciudad, la mínima escapada te puede servir

Es tan justo como necesario que te escapes con tu pareja de vez en cuando. Pon una buena excusa, un aniversario o un regalo de cumpleaños especial para organizarlo todo, mete primera y no mires atrás. Entre otras cosas, tendréis más tiempo para hablar y retozar en la cama ¡justo lo que llevas soñando tanto tiempo!

Todos los momentos de nuestra vida no son iguales, los acontecimientos de los últimos meses pueden ser determinantes para que te encuentres más o menos animado ante esos días de vacaciones. Tu entorno social también puede variar: la gente con la que sales, si tienes o no pareja son circunstancias que te marcarán diferencias a la hora de elegir cómo emplear tu tiempo libre.

Ruptura reciente: Acabas de salir de una relación muy complicada, todo el mundo te recomienda hacer un viaje para poner punto y final a esta dura etapa y alguien cercano te ofrece un estupendo plan de vacaciones ¡No puedes rechazarlo! A la vuelta seguro que te sentirás renovado.

Sin compromiso: ¿Notas últimamente que tu círculo de amigos está un poco limitado? Pues emplea tus vacaciones en enriquecerte y conocer gente nueva. Comienza por asistir a alguna de esas fiestas a las que te invitan y tú nunca vas; aunque tengas que superar la tensión de los primeros minutos en una habitación con personas que apenas conoces, puedes llegar a hacer contactos interesantes.

¿A qué esperas? Empieza cuanto antes a disfrutar de esos días libres tan esperados.

(Publicado en Revista Sexologies)